Turistas británicos estallan por colas “inhumanas” en España y obligan a reunión urgente del gobierno

Lo que debía ser el inicio de unas vacaciones relajantes terminó convirtiéndose en una pesadilla desesperante para cientos de turistas británicos que llegaron a España. Las colas interminables en el control de pasaportes, la falta de organización y el calor agobiante hicieron que muchos calificaran la experiencia como “inhumana”. La indignación fue tan fuerte que las autoridades españolas convocaron una reunión de emergencia para dar respuesta inmediata a la crisis.

Los hechos ocurrieron en varios aeropuertos de destinos muy visitados como Mallorca, Alicante y Málaga, donde los viajeros se encontraron con esperas de más de dos horas, sin suficiente personal que controlara el flujo, ni indicaciones claras. Algunos turistas publicaron videos en redes sociales mostrando las largas filas, personas mayores sentadas en el suelo y niños llorando por el cansancio.

Una turista británica que llegó a Palma de Mallorca con su familia explicó: “Llegamos con ilusión, pero nos topamos con una situación caótica. No había información, nadie nos ayudaba. Estuvimos casi tres horas de pie. Fue insoportable”.

Las imágenes y testimonios no tardaron en viralizarse, provocando una ola de indignación en redes sociales. Muchos exigieron respeto, mejor atención y condiciones dignas. El escándalo fue tan grande que desde el Ministerio del Interior de España se organizó una reunión urgente con personal de aeropuertos, fuerzas de seguridad y representantes de turismo para analizar la situación.

Según fuentes oficiales, el colapso se debió a una falta de personal en los controles de frontera, sumada al aumento de vuelos con la llegada del verano. También se reportaron fallos en los sistemas electrónicos y una mala planificación del flujo de pasajeros, especialmente en horarios pico.

Lo que más preocupa es que este tipo de incidentes puedan dañar la reputación turística de España, un país que recibe millones de visitantes del Reino Unido cada año. Los británicos son el grupo turístico más numeroso en muchas regiones costeras, y su descontento podría tener un impacto económico negativo si deciden cambiar de destino.

Desde el Reino Unido, algunos parlamentarios y asociaciones turísticas han criticado duramente la situación y han pedido explicaciones. “Nuestros ciudadanos merecen un trato respetuoso cuando viajan al extranjero”, expresó un diputado británico. “Lo ocurrido en los aeropuertos españoles es una vergüenza”.

Mientras tanto, los viajeros siguen contando su amarga experiencia. “Perdimos parte de nuestras vacaciones solo esperando en el aeropuerto. Fue agotador. Nunca nos había pasado algo así”, dijo una pareja de jubilados que viajó a la Costa del Sol.

El gobierno español ha prometido medidas inmediatas: refuerzo de personal, mejor organización en los puntos de control y atención prioritaria para personas vulnerables. Pero muchos se preguntan si será suficiente, ya que la temporada alta apenas comienza.

Por ahora, miles de turistas que tienen previsto llegar en las próximas semanas observan con preocupación. Y los que ya vivieron la experiencia, difícilmente la olvidarán.