Emotivo homenaje en Luisiana: Nueva Iberia recuerda a sus fundadores españoles y toca el corazón de todos
Lo que parecía una mañana tranquila se transformó en una jornada llena de emociones, orgullo y memoria. En el corazón de Nueva Iberia, la comunidad entera se reunió para rendir homenaje a los padres fundadores españoles con la inauguración de un marcador histórico que ya forma parte del paisaje de la ciudad. Las lágrimas, los aplausos y la música marcaron un evento que recordó cómo, hace más de dos siglos, un grupo de colonos cruzó el océano para sembrar las raíces de lo que hoy es esta encantadora ciudad de Luisiana.
La ceremonia tuvo lugar frente al nuevo monumento conmemorativo, instalado oficialmente por autoridades locales y estatales. Este marcador honra a los valientes colonos españoles que llegaron en 1779, especialmente desde las Islas Canarias y Andalucía, y que jugaron un papel clave en la fundación y desarrollo de Nueva Iberia.
Durante el evento, descendientes de estas familias, autoridades locales, historiadores y vecinos compartieron palabras cargadas de orgullo y emoción. Para muchos fue una oportunidad para reconectar con sus raíces, recordar las historias contadas por abuelos y sentir que el pasado aún vive en las calles, en los apellidos y en las costumbres que siguen vivas.
“Este monumento no solo honra a nuestros antepasados, sino que nos recuerda de dónde venimos. Ellos vinieron aquí sin saber qué les esperaba, y gracias a su esfuerzo, hoy tenemos una ciudad con identidad propia”, expresó emocionado Juan Domínguez, tataranieto de uno de los primeros colonos.
Historiadores locales aprovecharon para explicar la importancia de la presencia española en el sur de Estados Unidos, especialmente en Luisiana, donde la arquitectura, la gastronomía y hasta el lenguaje aún tienen huellas de ese pasado hispano. La instalación de este marcador también tiene un fuerte valor educativo, ya que se incluirá en rutas históricas para estudiantes y visitantes.
El evento también estuvo acompañado de actividades culturales que celebraron la herencia hispana de la región: hubo danzas folclóricas, degustaciones de comida tradicional y exhibiciones de arte que reflejaron la riqueza cultural traída por los fundadores españoles.
El alcalde de la ciudad, en su discurso, señaló: “Nueva Iberia no sería lo que es hoy sin la contribución de aquellos hombres y mujeres que dejaron todo atrás para construir un nuevo hogar. Este homenaje es más que un acto simbólico, es una muestra de gratitud”.
Para muchos asistentes, fue una experiencia profundamente conmovedora. Ver los nombres de sus antepasados en una placa oficial fue como verlos reconocidos después de siglos de historia. “Mi abuela me contaba que nuestros orígenes venían de España, pero hoy lo vi con mis propios ojos. Es un día que nunca olvidaré”, dijo emocionada una joven estudiante local.
Con esta iniciativa, Nueva Iberia apuesta por conservar y honrar su identidad cultural, reconociendo que el futuro de una comunidad también se construye con memoria. Y así, entre aplausos y banderas ondeando al viento, los ecos del pasado volvieron a sentirse más vivos que nunca.