España pone en jaque a miles de británicos con propiedades: esto es lo que está por cambiar y cómo podría afectarte
Miles de británicos que tienen casas de vacaciones en España están en shock tras conocerse que el gobierno español planea subir los impuestos para los propietarios extranjeros que no residen en el país. Esta medida, que aún se estudia, podría causar un gran impacto económico en personas que venían disfrutando del clima español sin vivir allí todo el año. Muchos temen que mantener su segunda vivienda se vuelva demasiado caro, y ya hay quienes piensan en vender.
Cada año, miles de ciudadanos del Reino Unido viajan a España para descansar, retirarse o simplemente disfrutar del sol en lugares como Málaga, Alicante o las Islas Baleares. Muchos compraron propiedades antes del Brexit, cuando aún podían disfrutar de algunos beneficios por ser ciudadanos de la Unión Europea. Pero ahora, con este nuevo escenario fiscal, el panorama está cambiando.
Lo que se está discutiendo es un aumento de los impuestos para los no residentes, es decir, para aquellas personas que tienen propiedades en España pero no viven allí de forma permanente. Aunque ya existen algunos impuestos obligatorios, como el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) y el impuesto sobre la renta imputada por tener la vivienda vacía, el nuevo plan busca aumentar la carga fiscal aún más.
¿El objetivo? Según fuentes cercanas al gobierno, se busca equilibrar la economía y controlar el mercado inmobiliario, que en algunas zonas turísticas se ha encarecido demasiado. Pero muchos expertos opinan que esta medida puede salir cara, ya que podría ahuyentar a los inversores extranjeros y hacer que miles de propietarios británicos vendan sus casas.
Varios jubilados británicos que pasan parte del año en España ya han levantado la voz. Dicen que este cambio sería injusto, porque muchos de ellos han invertido todos sus ahorros para vivir tranquilos durante su retiro, y ahora se enfrentan a un gasto inesperado que podría desestabilizar sus finanzas personales.
Por otro lado, asesores fiscales recomiendan a los propietarios que estén muy atentos a cualquier cambio legal y que consulten con expertos antes de tomar decisiones apresuradas. Algunos incluso exploran opciones como alquilar sus propiedades o cambiar su residencia fiscal para evitar una subida tan fuerte de impuestos.
Aunque aún no hay una ley oficial aprobada, el debate está muy caliente y se espera que el gobierno español dé más detalles en los próximos meses. Mientras tanto, la incertidumbre crece, especialmente entre los británicos que compraron en España pensando en un futuro tranquilo y soleado.